Tips para trabajar con masas

¿Alguna vez les ha pasado que al trabajar con masas se vuelven un ocho? Por ejemplo, la masa se les pega a la superficie de trabajo, se empegosta, al hornearla pierde su forma, o simplemente no tiene la textura que estaban esperando. Estos son algunos síntomas comunes de un tratamiento incorrecto de la masa. Muchos nos han escrito preguntando cómo trabajar con masas de harina, así que hoy vamos a compartir algunos de nuestros tips para trabajar con masas.
Tip #1: No tengas miedo
Lo primero es no tener miedo. Trabajar con masas puede parecer difícil y complejo, pero si lo hacemos con disciplina y consistencia no tiene por qué ser un proyecto complejo. En Una Pizca nos encanta trabajar con masas. Sentimos que es una oportunidad para jugar en la cocina, casi como cuando jugábamos con plastilina en el preescolar. La clave es enfrentar el proyecto con ánimo y emoción, y sobretodo, sin miedo.
Tip #2: Enharina constantemente tu superficie de trabajo
Esto debes hacerlo no solo al inicio, sino durante todo el proceso de amasado, asegurándote de cubrir todas las áreas con frecuencia para evitar que la masa se pegue. No hacen falta grandes cantidades de harina. Por el contrario, es necesaria solo una capa muy fina que ayude a que la masa se deslice sobre la superficie en lugar de pegarse. Si agregas exceso de harina, la masa comenzará a absorberla, cambiando así la proporción de harina en la receta. Este es un error común, que termina endureciendo y secando la masa. Por ello, te recomendamos agregar solo el mínimo necesario de harina, espolvoreando la superficie con frecuencia.
Tip #3: Cuidado con la presión y dirección del rodillo
A la hora de extender una masa con el rodillo, es muy importante tener en cuenta la cantidad de presión que ponemos sobre él, así como la dirección en la que extendemos. Muchas personas piensan que para extender la masa deben aplicar presión sobre el rodillo y moverlo hacia adelante y hacia atrás extendiendo siempre con la misma presión. Pero esto no está bien. Véanlo de esta manera: Si aplican ruedan el rodillo extendiendo hacia adelante y hacia atrás lo único que están logrando es estirar y encoger la masa sucesivamente. Esto hace que se sobre trabaje la masa, se desarolle demasiado gluten, y por ende se endurezca la masa. Lo ideal es comenzar desde el punto medio de la masa, y con el rodillo aplicar presión hacia adelante. Luego, levantar el rodillo, y comenzando desde el centro nuevamente, aplicar presión hacia abajo. De esa manera, la parte superior de la masa se estira y desliza hacia adelante, mientras que la parte inferior se estira y desliza hacia atrás. La cantidad de presión siempre debe ser la misma, pero la dirección en la que extendemos varía.
Tip #4: Deja que la masa “camine” de manera uniforme
Lo ideal es que la masa nunca se pegue, sino que más bien “camine” sobre la superficie, deslizándose sin mucho esfuerzo. Una vez que hayas estirado la masa hacia adelante y hacia atrás, asegúrate de levantar la masa, enharinar de nuevo la superficie de trabajo, y girar la masa 180 grados. Luego repite el estiramiento hacia adelante y hacia atrás. De esta forma te asegurarás de estirar la masa de manera uniforme.
Tip #5: ¡Deja que la masa descanse!
Una vez que has manipulado la masa, es importantísimo dejarla reposar. Al igual que nosotros después de un largo día de trabajo, las masas necesitan reposar luego de ser trabajadas. El proceso de amasado hace que se desarrolle el gluten, y que la masa esté tensa y retraída. El proceso de reposar la masa ayuda a que el gluten se relaje y a que la masa desarrolle mejor estructura y sabor, haciéndola más fácil de manipular. Si alguna vez se te ha encogido la masa al hornearla, lo más probable es que sea porque no la dejaste descansar lo suficiente antes de llevarla al horno.
Estos son algunos de nuestros tips para trabajar con masas. Ahora que ya sabes trabajar masas como todo(a) un(a) profesional, aquí te dejamos algunas de nuestras recetas preferidas para que puedas poner en práctica todos los tips que acabas de aprender.